LO QUE USTED IGNORA LOPUEDE LASTIMAR

Algunos dicen que la educación es la respuesta a casi todo, y aun así, entre más sabemos más profundo nos hundimos. "...Siempre están aprendiendo y nunca logran llegar al conocimiento de la verdad" (2 Timoteo 3:7).

Nuestra generación ha sustituido la verdad por los hechos, simplemente queremos saber si las cosas "funcionan".  Los hechos son como una receta, pero la verdad es como toda una comida. Digiera una verdad y su vida cambiará. "Adquiere la verdad y no la vendas…" (Proverbios 23:23)

• Debemos apreciar la verdad. No hay manera de ser un cristiano feliz y victorioso sin una firme convicción basada en una verdad fundamental.

• Debemos adquirir la verdad. "Adquiera la verdad". La búsqueda le costará tiempo precioso, disciplina y obediencia, pero bien vale la pena.

• Debemos conservar la verdad. "No la venda". Algunos lo tentarán pero no lo haga, aférrese a la verdad y nunca la deje ir, 2 Timoteo 3:16,17. El punto de partida en el crecimiento cristiano es tener una firme convicción respecto a la inspiración y autoridad de la Biblia. En este tema quiero dar algunas razones sólidas para tener esta seguridad.

El hombre sólo tiene tres problemas: el pecado, el sufrimiento y la muerte; y la Biblia es el único libro en la tierra que tiene la respuesta a cada uno de estos tres aspectos. Por esta razón es importante que usted entienda y tenga una convicción, tan firme como una roca, sobre el hecho de que la Biblia es la Palabra de Dios. Hay una guerra contra la Biblia. El diablo odia este libro y quiere destruirlo. Muchos lo desprecian, algunos lo niegan, otros lo distorsionan, lo emplean mal y aún abusan de él, pero el peor enemigo de la Biblia es el cristiano que la ignora o descuida, y apenas si habla de ella.

Polvo en la Biblia y sequedad en el corazón. He estado sirviendo al Señor por mucho tiempo, y lo que me hace perseverar es la verdad y la convicción. Los sentimientos vienen y van, pero la Palabra de Dios nunca fluctúa. ¿Por qué es esto tan importante? • Su salvación depende de entender el mensaje del evangelio que está en la Biblia. • Su seguridad depende de descansar en la verdad de la Biblia. • Su crecimiento espiritual depende de vivir de acuerdo a los principios de la Biblia. • Su poder para testificar depende de la confianza que usted tenga en la Palabra de Dios. Por consiguiente, usted debe estar completamente seguro de que la Biblia es la Palabra de Dios.

Cada cristiano debe conocer CÓMO ENFRENTAR LA TENTACIÓN, 1 Corintios 10:12,13. La tentación está en todas partes; no tenemos que andar buscándola, ella nos encuentra. No somos tentados por ser pecadores, Jesús fue tentado y él nunca cometió pecado (1Pedro 2:22); somos tentados porque somos humanos. Sin embargo, la tentación debidamente manejada nos puede acercar más a Dios.

Tres maneras de enfrentar la tentación:

Cediendo. Hoy tenemos una generación que dice: "¿A quién le importa la tentación? Yo simplemente hago lo que se me antoja", "Todo lo que sea natural es hermoso, y todo lo que es hermoso debe ser correcto. Así que si te sientes bien, hazlo". Esa realmente es una forma de vida animal. Ellos, sencillamente ceden al instinto, como muchos ceden a la tentación.

Luchando. Luego están los que luchan contra la tentación en la fuerza de su propia carne. Siempre están batallando contra la tentación. Luchan constantemente, pero siempre fracasan. Yo creo que todos hemos estado ahí, peleando y fracasando, peleando y fracasando.

Sobreponiéndonos por medio de Cristo. Esa es la manera de sobreponerse a la tentación. Créalo o no, usted puede vivir victoriosamente, no tiene que ser esclavo del mundo, de la carne y del diablo, 1Cor. 10:12,13.

Todos estamos sujetos a la tentación. Usted será tentado y bombardeado de tentaciones en las áreas de deshonestidad, materialismo, sexualidad, codicia y orgullo. El ser salvo no lo hace inmune a la tentación, y ser tentado no es pecado, Hebreos 4:15.  Pero tenga cuidado y cuídese del orgullo. Recuerde que 1 Corintios 12 dice: "Así que, el que piensa estar firme, mire que no caiga". La persona orgullosa tienta al diablo a tentarlo, y si usted es arrogante o descuidado respecto al pecado, puedo decirle, va a caer.

¿Por qué Dios no termina de una buena vez con el diablo? ¿Por qué no simplemente quita de nosotros toda tentación? Porque ese no es su plan para nosotros. El plan de Dios no es la inmunidad, sino la VICTORIA. 

P.s John D. Lambraño