El enemigo no tiene sino una entrada para tocar nuestras vidas, que es la mente.
El sabe que no podrá tocar nuestras vidas a menos que logre engañarnos; Apoc. 12:9; 20:2-3. Aunque muchos piensan que el diablo puede entrar por varias partes a nosotros, él sólo tiene una: la mente.
(Rom.12:2; Filip.4:8; Is.26:3). La Biblia habla muchas veces de cuidar nuestra mente.
Pablo en el libro de Efesios habla de poner el yelmo de la salvación, el casco. Póngase el casco para proteger su cabeza, para proteger su mente. Él sabe que el enemigo no va a poder tocar nuestra vida a menos que toque nuestra mente. Dios siempre hace lo correcto. Su camino es ele mejor, aunque a nuestros ojos parezca que todo está errado… Si pediste a Dios una cosa y recibiste otra, confía. Ten la seguridad de que Él siempre dará lo que necesitas, en el momento adecuado. No siempre lo que deseas es lo que necesitas. Como Dios nunca falla en la entrega de sus pedidos, sigue adelante sin dudar, ni murmurar. Déjame compartir algunas verdades importantes: *Tu cerebro está envuelto en todo lo que haces. *Cuando tu cerebro trabaja correctamente, trabajas bien. *No existe nada tan complejo como el cerebro humano.
Vamos a usar el libro de Nehemías, capitulo 4, para ilustrar los cinco ataques mentales que el enemigo trae contra los hijos de Dios. El libro de Nehemías puede servir para muchas cosas; puede ser un libro de liderazgo, un libro de reconstrucción y puede ser leído desde la perspectiva e la restauración de la personalidad del ser humano. La Biblia dice en le capitulo 4, que los judíos habían construido parte del muro; Nehemías 4:1. Cuando los enemigos de Israel vieron que estaban siendo reconstruidos los muros, hicieron 4 preguntas y una declaración y las preguntas fueron muy sutiles y tenían como finalidad estimular el pensamiento de la gente para que no creyera en la obra de la reconstrucción: ¿Qué hacen estos débiles judíos?; ¿Se les permitirá volver a ofrecer sus sacrificios?; ¿Acabarán en un día?; ¿Resucitarán de los montones de polvo las piedras que fueron quemadas?; y al final, una declaración: “Lo que ellos edifican del muro de piedra, si subiere una zorra lo derribará” Nehemías 4:3 Veamos esos ataques mentales:
1.- EXALTACIÓN DE LA DEBILIDAD. El trabajo de Satanás es condenarte, el trabajo del espíritu santo es convencerte. Cuando Satanás venga a señalar tu debilidad, (no estoy diciendo que ignores tu debilidad) reconoce tu debilidad, pero lleva esta debilidad a Cristo. Al diablo hay que hablarle con autoridad; yo reconozco que soy débil, por eso estoy en este negocio con Dios, porque sin Él nada puedo hacer.
2.- EXALTACIÓN DEL PASADO, PARA DUDAR DEL FUTURO. Nehemías 4:2. “Se les permitirá volver a hacer sacrificios”. A Satanás vive de la basura, le encanta ir al basurero a ver lo que encuentra. Satanás juega con nuestro pasado para hacernos enturbiar nuestro futuro. Cuando logra traernos a la mente nuestro pasado, nos hace retroceder para no ser creyentes comprometidos con Dios, por temor a nuestro ayer. Pero… Dios perdona nuestro pasado, nos libera del poder del pasado y nos devuelve nuestro pasado, para que con nuestro pasado, ministremos a la gente. Permita que Dios opere esas tres cosas en su pasado y Satanás no tendrá poder sobre su vida. Declare Hebreos 10:19-21; Apoc. 21:5; Miqueas 7:19 y 2Cor.5:17. Por
tanto, no me voy a dejar amedrentar mi mente, ni por mi debilidad, ni por mi pasado; porque Dios toma mi pasado de una manera grande y poderosa.
3.- EXALTACIÓN DE LA DUDA, PARA TEMER DEL PRESENTE. Nehemías 4:2 “¿Acabarán en un día?”. Cuando el diablo ve que seguimos adelante, que lo enfrento cuando exalta mi debilidad, que lo enfrento cuando me quiere sacar el pasado; él quiere hacerme temer el presente y empiezo a decir: Todavía tengo fallas, no soy lo que quisiera ser. Entonces comienzo a temerle al presente; pero yo debo reconocer que la obra del Espíritu Santo es muy grande y muy fuerte y Él está trabajando; puedo decirle al enemigo; No, no voy a terminar en un día; pero en este día el Espíritu de Dios la va a adelantar, porque Él ha dicho. “Quién comenzó en mi la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo”. No creas en las mentiras del diablo, porque el asunto no es lo que sientes, sino lo que Dios declara; y Él lo está haciendo en tu vida de una manera profunda y estable.
4.- EXALTACIÓN DEL FUTURO, PARA IMPEDIR LA VISIÓN DE RESURRECCIÓN. Nehemías 4:2 “¿Resucitarán de los montones de polvo las piedras que fueron quemadas?” Los enemigos no vieron cómo había crecido el muro, sino las piedras que estaban todavía en el piso quemadas. Decían: ¿ustedes creen que van a resucitar de esas piedras, de ese polvo?; ¿Creen que puede salir algo de estas ruinas? Cuantas veces lo único que hace el enemigo es señalar las ruinas de nuestra vida. Todavía hay áreas quemadas, tenemos que admitirlo. Satanás nos recuerda… todavía hay deudas, todavía tienes por ahí un hijo fuera del matrimonio, todavía tienes desordenada tu vida, todavía tienes… ¡le encanta eso! Pero tenemos que pararlo con autoridad y no permitir que toque nuestra mente y declarar: Romanos 8:11 y 1Cor.6:19. Jesús puede hacer que esos pedazos que todavía están en el piso, logren unirse, porque Él levantó un valle de huesos secos, e hizo que los huesos se pegaran, les puso tendones, músculos, vida y levantó todo un ejército. El mismo que levantó a Lázaro de entre los muertos, está viviendo dentro de mi; y lo más poderoso que Pablo dijo fue: “El Espíritu que levantó a Jesús de entre los muertos mora entre vosotros”. Cuando tú controlas tu mente y dejas que el Espíritu de Dios la controle, ya no hay puertas. Cuando el diablo se cansó de estimular la mente con las 4 preguntas, hizo una declaración: “Lo que esos débiles judíos construyen, si se sube una zorra lo derribaría”. Ese es el quinto ataque mental que veremos el próximo domingo: EXALTACIÓN DE LA DUDA, PARA DESVIRTUAR LA RECONSTRUIDO.
P.s John David Lambraño
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